El proyecto apoyado por el Fondo Fundación WWB Colombia para la investigación trabajó de manera articulada con el Instituto de Estudios Interculturales y con un grupo de mujeres organizadas de la zona rural y urbana del municipio.
El evento de difusión tuvo lugar el miércoles 29 de noviembre y en él se conocieron los resultados del proyecto de co-creación liderado por investigadoras del Instituto de Estudios Interculturales de la Pontificia Universidad Javeriana, de Cali, ‘De la soberanía alimentaria a la comercialización: autonomía económica e identidad campesina de mujeres organizadas en el municipio de Tuluá, Valle del Cauca’, apoyado por el Fondo de Investigación de la Fundación WWB Colombia.
La comunidad que hizo parte de este proyecto fueron grupos de mujeres organizadas: Flor del Campo, Aromas del Campo, Sueños de Mujer, Agromujer, Mujeres Guerreras, Emprendedoras del Campo, Entre Tijeras y Costuras; quienes se encuentran en las zonas rurales de Tuluá, en los corregimientos y veredas La Moralia, La Diadema. Vereda La Mansión, Vereda San Marcos, Puerto Frazadas y Cocorná. Solo uno de los grupos que hizo parte del proyecto se encuentra radicado en la zona urbana del municipio, en el barrio Buenos Aires.
Las investigadoras y la comunidad, como parte importante del proyecto, dispusieron el lugar de manera horizontal para compartir cómo crecieron en autonomía y aprendizajes para la misma, a partir de sus unidades y proyectos productivos agropecuarios y de manufactura.
Asimismo, el cierre del evento de difusión se realizó con una feria de economías populares feministas de las mujeres campesinas, en donde todas las personas que asistieron al evento pudieron conocer, disfrutar y, sobre todo, apoyar los productos ofrecidos por cada comunidad.
Feria de economías populares feministas de las mujeres campesinas.
Este espacio fue ambientado de manera simbólica con un mandala realizado por el grupo de mujeres organizadas provenientes del municipio de Tuluá con plantas, hierbas, alimentos y otros materiales que utilizan para la realización de sus productos.
Además, durante todo el compartir de saberes y aprendizajes obtenidos en el proceso de investigación, las mujeres presentes en el espacio rindieron un sentido homenaje en la memoria de María Catalina Gómez Dueñas, quien fue la coordinadora del proyecto. Le agradecieron por todas sus enseñanzas y se mostraron conmovidas por la presencia de su madre, María Zoraida.
Madre de María Catalina Gómez Dueñas expresa sus agradecimientos con las mujeres que hicieron parte del proyecto.
“Junto con María Catalina construimos este proyecto de manera articulada con el Instituto de Estudios Interculturales porque creemos y seguiremos considerando que hay que co-crear los proyectos porque es muy inútil para las comunidades que estos salgan desde un escritorio directamente”, afirmó una de las investigadoras, Gabriela Valencia.
Es por ello que, Sandra Sanchez, investigadora comunitaria, expresó que “este proyecto ha sido súper beneficioso para todas, porque fue hecho desde el corazón de las mujeres campesinas, con ayuda de la academia, pero fue pensado para nosotras.”
Para poder compartir estas experiencias, aprendizajes y reflexiones, las investigadoras se dedicaron, en un primer momento, a realizar unas jornadas de caracterización, en donde elaboraron fichas de las unidades y de los proyectos productivos, visitaron cada una de las fincas, de los espacios en los que las mujeres hacen vida.
Seguidamente, las investigadoras estuvieron enfocadas en establecer las barreras y las potencialidades, pues las mujeres que hicieron parte importante de esta investigación y sus grupos tienen unos obstáculos para avanzar; sin embargo, fue más importante, para ellas, enfocar el espacio en compartir todas sus potencialidades.
Además, en otro de los momentos de la investigación, fortalecieron sus productos. Esto teniendo en cuenta que además de la formación era importante reforzar otros aspectos, pues, de acuerdo con Gabriela Valencia, “sabemos que la materialización, que el insumo, que la carne, que el chorizo, que el frasquito y lo demás son necesarios para que los emprendimientos avancen; no solamente sentarnos a conversar, es complementar esto con fortalecer cada uno de los grupos.”
Gabriela, en su calidad de investigadora del proyecto, destacó la importancia de enfocarse en las expertas comunitarias:
“En este proyecto y tal como nos enseñaron, priorizamos las expertas comunitarias, los saberes populares que están en el territorio son fundamentales y, gestionamos entonces, materiales e insumos, tal como les decía, los emprendimientos en las zonas rurales necesitan, de manera prioritaria, materiales y maquinarias.”
Además, durante el evento de difusión de los resultados del proyecto, las mujeres presentes expresaron sus agradecimientos hacía los conocimientos aportados por la academía y con la Fundación WWB Colombia por su apoyo para que la investigación fuera posible.
“Agradecimientos especiales a todas las personas que tuvieron que ver para que esto fuera posible, por supuesto a la Fundación WWB Colombia, por el acompañamiento y porque viene haciendo un trabajo muy importante en pro de los derechos de las mujeres”, indicó Rosa Castillo, Delegada de la Coordinación de la línea de sistemas económicos, derechos humanos e interculturalidad, del Instituto de Estudios Interculturales.